Repeti la tipica rutina mañanera, levantarme, ir al baño, desayunar y vestirme. Y a las 7:50 salir de casa para llegar al colegio.
Tras las clases de primera hora, baje con mi bocadillo al recreo y me sente a esperar a Nacho, Isi y Jal.
- Carla podemos hablar a solas. Pregunto Nacho, el brillo de sus ojos era diferente a otras veces. - Jal ven tambien tengo que hablar contigo.
- ¿Yo para que?
Jal era un chico bastante arisco, y quizas un borde, pero a final acababas tomandole cariño.
- A ver os necesito, se que suena raro, pero ¿os acordais de todo eso que os conte de los elementos?
- Si, bueno, lo que contaste en la excursion dices ¿no? Dije yo mirandole mientras recordaba aquel dia.
**Recuerdos**
Nos fuimos de excursion, en el autobus Nasha y Shasha iban juntas en la parte trasera, despues Jal e Isi y los primeros Nacho y yo.
Tras haber pasado el dia de fiesta en el parque de atracciones, Nacho cayo dormido en el autobus y yo, dichosa mi mala leche, comenze a preguntarle cosas pues sabia que hablaba en sueños.
Jal e Isi se acercaron a escuchar su relato.
- Los cinco elementos, tierra, agua, fuego y aire, y yo s sacerdotisa, Kira Silvermoon.
- Pero si eres un chico.
- Estoy atrapado en este emboltorio, pero en realidad soy una chica, ¿vistes mis dibujos, los de la chica de pelo marron largo?
- Si por su puesto.
- Esa soy yo, de vez en cuando me transformo en ella, es muy doloroso.
**Fin de los recuerdos**
- ¡¡Ahora lo entiendo!! Dije exaltada.
- ¿Que entiendes?
- Ah nada, perdon, pensaba en alto.
Pero ahora entendia lo que Paxie habia dicho y tambien Morfeo, ahora me encajaban las piezas. Pero aun no confiaba que fuera real todo aquello, yo necesitaba pruebas, vale, si, creia en la magia, pero de ahi a creer que una chica esta encerrada en el cuerpo de un chico y que se transforma... no eso no cabia en mi cabeza.
Nos metimos de nuevo en el colegio y bajamos al gimnasio a hablar, Nacho dibujo uno simbolos en nuestras manos, Jal y yo nos miramos extrañados.
- ¿Que es esto? Pregunto despectivamente Jal mienras se miraba el simbolo de la mano.
- Sois dos de los guardianes, Carla guardiana del fuego y tu Jal del aire.
- Anda ya. Yo me voy.
- Es verdad todo lo que te digo te lo prometo, tenemos que quedar esta noche para hacer el hechizo.
- A no, yo esta noche tengo concierto y no voy a faltar.
- Pues hare que se anule el concierto.
- Tu no haras tal cosa. Dije yo por primera vez. - Yo tambien ire al concierto y no voy a faltar.
- Bueno pues vosotros sabreis, cuando el llegue entonces vendreis a mi. Nacho parecia disgustado, pero ¿como ibamos a creer asi de buenas a primeras? - Borraros los simbolos.
Jal y yo volvimos con Isi y vimos como Nacho caminaba hasta Shasha y Nasha. Ellas al contrario que Jal y yo afirmaron con la cabeza a Nacho y sonrieron.
- ¿Tu crees que tiene razon en todo esto? Me pregunto Jal.
- No se, ya no se que pensar. Le conte entonces el sueño que habia tenido, Jal se quedo pensando y finalmente reacciono.
- Quizas, hayamos sido un poco bordes ¿no crees?
- Puede, pero es que es un poco absurdo todo esto. ¿Como va a ser una chica?
- Ni idea, oye y si mejor le decimos que si, asi quizas se le olvide este rollo.
- Vale digamosle que si.
Lo que paso a continuacion fue un poco extraño, Jal y yo nos disculpamos, pero Nacho me dijo que se habia equivocado, que yo no era la guardiana del fuego, en parte mejor para mi, asi me quitaba un problema de encima, pero no era tan facil, yo tenia algo que Nacho necesitaba, uno de mis libros de magia en el que estaba el ritual para convocar a los espirituales.
Pero las cosas parecieron calmarse, pronto encontramos al cuarto guardian, Cristian. Un joven arrogante y creido que no os traeria mas que problemas en un futuro, pero claro eso no lo sabiamos nosotros.
Y asi comenzo nuestra historia juntos, una historia, con cuatro guardianes, una sacerdotisa, amigos y yo, una que aun no sabe que pinta en esta historia, con dioses, hadas, demonios y mas seres extraños que nos acompañarian en nuestras aventuras.
Pero por el momento, solo debemos prepararnos para la batalla que se acerca a nosotros.
Y de nuevo volvimos a la noche, ya llevo un mes que no escucho que me llamen, tampoco he visto a Paxie ni a Morfeo. Quizas todo fue un sueño, un sueño alimentado por la imaginacion....
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